jueves, 9 de junio de 2011

Un viaje en tren

Sentando en un vagón de una línea que no recuerdo
me pierdo en pensamiento propios del día a día
me ausento de todo lo que pasa a mi alrededor
como hago en no pocas ocasiones.

El tren llega a la siguiente estación
el tiempo se para, el mundo da un vuelco
cascada morena, mirada cálida, sonrisa inocente
el tren sigue su periplo ajeno a todo.

Vuelvo en sí y no hago más que observarte
pensando que lo hago cuando nadie me ve
pero ahí estás tú, devolviendo la mirada
mirada que denota que algo se ha creado.

No sé que piensa, pero me mira y se ruboriza
yo, por mi parte, me ruborizo con pensarlo
cuando la miro ella desvía la mirada
y hace como si no pasara nada. Conquista.

En mi cabeza me repito todo el tiempo:
"Le voy a decir algo", pero me siento inmóvil
"Y si la saludo", pero estoy bloqueado.
A todo esto las paradas siguen pasando.

Observo el letrero que indica que la siguiente estación es la mía
"¿Me bajo o no me bajo"
Al final me quedo sentado en el mismo sitio
"Hay oportunidades que hay que aprovechar"

Sigo en el tren ajeno a donde me lleva la vida
veo las circunstancias, interpreto las señales
pasan tres estaciones más de la línea del destino
y sin más dilación me levanto y me acerco.

Miradas, gestos, nervios, sensaciones
espiral de sentimientos que se arremolinan sin parar
ella se levanta y también se acerca
me besa, se separa de mí y sonríe.

"Me llamo María", dice con voz suave
yo no puedo hacer más que demostrar que soy feliz
un halo de magia se instala entre nosotros
y el tren se detiene nuevamente en otra estación.

Un pitido indica que las puertas se van a cerrar
"Esta es mi estación. Me tengo que bajar", dice ella
sale corriendo hacia fuera pillándome desprevenido
y cuando me doy cuenta una puerta está entre nosotros.

Nos miramos a través del cristal y así acaba todo
un amor bonito, un corazón roto, preguntas sin respuesta
desde entonces voy todos los días a esa estación
con el objetivo de saber algo de esa chica.

Y al final todos los días vuelvo a casa con la misma idea:
"Se llamaba María".

2 comentarios:

  1. Para ser un estudiante de periodismo has hecho una buena descripción de un momento vivido, seguramente por muchos que han estado en tren. Lo has relatado con mucha fluidez y ha sido muy fácil de captar ese sentimiento instantáneo..(como el nescafé, jejeje),fuera de bromas, me ha gustado. Mi sincera felicitación....me pasaré otro dia por tu blog
    Un saludo

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